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20. SIGUE A LOS MEJORES Y COMPITE PRINCIPALMENTE CON TU MISMO

Arthur Ashe

En realidad nunca compites con el contrincante. Rivalizas con tu mismo, con tus estándares superiores y cuando llegas a tus bordes, sientes una alegría verdadera

(Richard Bandler, 2008)

Desarrollo de las habilidades propias:

  1. Elige un „modelo para seguir” – una persona cuyas habilidades físicas quisieras reproducir. Dedica lo más tiempo posible para estudiar su comportamiento en vivo o de las grabaciones video. Relájate cuando miras aquella persona y suaviza tu manera de percibir y escuchar. Fíjate en el flujo de comportamientos de tal persona.
  2. Cuando ya te familiarizas con su comportamiento, cierra tus ojos, relájate y reproduce la secuencia de sus actividades en el nivel mayor de perfección. Observa y escucha todo con atención para crear el modelo de la habilidad deseada.
  3. Cuando ya hayas pasado algún tiempo viendo sus actividades, desplázate en relación a la imagen de tal persona y entra adentro. Imagínate, que ves todo con los ojos de la persona que ha llegado a la perfección, que oyes con sus orejas y que sientes sus sentimientos.
  4. Recrea en la mente la misma secuencia de actividades, pero ahora desde el interior. Fíjate en la reacción de tu cuerpo. Repite varias veces hasta que sientas que te hayas acostumbrado.
  5. Sal del cuerpo de aquella persona con la intención de mantener sus habilidades en la mayor medida posible cuando regreses a su conciencia normal.
  6. Cuando tengas la oportunidad, practica la habilidad prestada con la mayor frecuencia posible. Observa como el entrenamiento descrito arriba mejora tus resultados.
  7. Repite este ejercicio al menos diariamente durante los primeros 21 días y luego una vez a la semana por lo menos para mantenerse en el mismo nivel. Entre los ejercicios practica en realidad, siempre cuando puedas.

(Robert K. Cooper, 2006)

En el mudo de hoy, los que sobrepasan lo mejor, llegan a la conclusión que es el obtener los resultados cada vez mejores, y no la rivalidad, que hace la mayor diferencia. Aquellas personas están conscientes de que sus triunfos no requieren que otra persona perdiera.
Los científicos recomiendan, que la gente deje la idea de rivalidad durante el entrenamiento porque los resultados mejoran cuando te libras de la presión. En realidad, según la opinión expresada por uno de los investigadores que se ocupan de este tema los resultados mejores no sólo prescinden de la rivalidad, ya que parece que comúnmente requieren que no la haya.